sábado, 15 de septiembre de 2012

Solifugos

Se conocen alrededor de 1.100 especies de solífugos (o solpúgidos) y los más grandes pueden alcanzar los 7 centímetros de longitud, llegando hasta los 12 con las patas extendidas. Al tener un aspecto parecido al de las arañas también se les denomina arañas de sol porque suelen cazar durante el día (no todas las especies) o arañas de viento porque los machos corren a gran velocidad (hasta 16 kilómetros por hora en trayectos cortos). A diferencia de aquéllas, los solífugos carecen de veneno y se limitan a desgarrar a sus presas con la ayuda de sus enormes quelíceros, que son biarticulados y forman dos poderosas pinzas. Luego las rocía con un líquido digestivo antes de aspirar la papilla alimenticia por la faringe. Los pedipalpos les sirven como órganos prensiles y adhesivos y el primer par de patas tiene funciones táctiles. Exclusivamente carnívoros, son de extraordinaria voracidad y devoran sus presas aún vivas. Se alimentan de termitas y otros artrópodos, pero la mayoría tienen gustos más amplios, llegando a devorar a pequeños vertebrados como reptiles, ratones e incluso pájaros. La mayoría viven en desiertos tropicales y subtropicales en América, Asia y África.


Hay muchas leyendas sobre este animal como que te inyecta un veneno para que mientras te devora no sientas nada, que salta dos metros...

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Evolución humana.

Evolución humana.